El hombre juega a muchos juegos, pero no hay el juego de los juegos. Probablemente, Wittgenstein cree que sí existe, pero el juego de los juegos sólo lo juega Dios; el sistema absoluto del saber es el saber divino, pero ese saber no es accesible al hombre. Se ve entonces, ahora formulado por filósofos, que la ciencia no es consistente: esto no significa que no haya partes suyas más o menos coherentes, pero en su totalidad no se sabe si lo es.
La ciencia moderna no tiene fundamento ni consistencia completa. Si a eso se añade que la realidad no se deja encerrar en el modelo científico (la realidad sale contestona), sólo nos queda confiar en que los modelos respondrán porque contamos con muchos investigadores. Pero no tenemos certeza, es decir, plena confianza científica-racional sobre la lógica del progreso científico.
Leonardo Polo en ¿Quién es el Hombre?
1 comentario:
Sigo muchos blogs y paginas de ciencia en Internet y es interesante la cantidad de esfuerzo y tiempo que dedican a Dios cuando casi la inmensa mayoría de ellos se declaran ateos y a la religión como una superstición.
Eso si, para todo aquel que discrepe lo mas mínimo de sus posturas tiene reservado un comportamiento que deja como un neófito al mismo Torquemado en el mantenimiento de lo que entienden como "su ortodoxia".
Publicar un comentario